IMPONEN PRISIÓN PREVENTIVA A PRESUNTA BANDA CRIMINAL POR TENENCIA ILEGAL DE ARMAS Y EXTORSIÓN CAPTURADA EN CAJABAMBA
El juez titular del Juzgado Penal de Investigación Preparatoria de Cajabamba, César Salaverry Pajares, ha declarado fundado el requerimiento fiscal de prisión preventiva de 9 meses para los imputados Miguel Orlando Sandoval Escobedo, Filomeno Nicolás Peña y Luis Marquina Briceño. Por los delitos tenencia ilegal de armas de fuego y municiones, considerados como banda criminal, en agravio del Ministerio del Interior, representado por su Procuraduría Pública y también por el delito de extorsión en agravio de los ciudadanos Narcizo Marquina Ruiz, Bernardita Paredes Flores, Esteban Marquina Evangelista y demás personas por identificarse.
La resolución del juez Salaverry confirma la presencia de los elementos esenciales para la comisión de estos ilícitos, tal como lo establece el Código Procesal Penal. En consecuencia, se ha dispuesto el internamiento de los imputados por un periodo de 9 meses en un establecimiento penal a determinar por la autoridad penitenciaria.
CRONOLOGÍA DE LOS HECHOS:
El 9 de enero de 2024, a las 13:15 horas, agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) realizaron una intervención en la plaza principal de Cajabamba. En dicha intervención, se detuvo un vehículo negro con placa BRU-142, ocupado por Miguel Sandoval (27) y Filomeno Peña (23). El registro del vehículo reveló la presencia de un arma de fuego tipo pistola, marca CANIK-33, serie T6472-10 AH00198, calibre 9x17mm; dos stickers con la figura de un leopardo en color amarillo, asociado a organizaciones criminales; y un pasamontaña negro.
A tan solo 15 metros del lugar, Luis Marquina Briceño (26) fue detenido mientras observaba la intervención y realizaba llamadas telefónicas. Todos los intervenidos fueron trasladados a la comisaría PNP de Cajabamba, en calidad de detenidos por considerarse en flagrancia delictiva, relacionada con los delitos de tenencia ilegal de armas de fuego y extorsión.
La revisión de los teléfonos incautados reveló comunicación constante entre los acusados, confirmando su vinculación en la comisión de actos ilícitos, como la extorsión mediante mensajes dirigidos a residentes de Cajabamba.
