CONDENAN AGRESIÓN A PERSONAL Y DAÑOS A OFICINAS DEL MINISTERIO PÚBLICO EN CAJABAMBA
Ronderos ingresaron rompieron puertas y ventanas y agredieron a personal, ante supuesta liberación de presuntos delincuentes.
Totalmente condenable ha sido el accionar de un grupo de ronderos contra fiscales y personal del Ministerio Público en la provincia de Cajabamba, en comunicado, el presidente de la Junta de Fiscales, rechaza todo tipo de violencia y garantiza un proceso transparente en el accionar de los miembros de esta institución y de no darse, se ha demostrado sanciones ejemplares contra malos fiscales y trabajadores.
La turba de ronderos reaccionó de esa forma, -según refieren- porque sospecharon de una eventual liberación de dos presuntos sicarios detenidos haces dos semanas atrás. Los sujetos se encuentran en pro ceso de investigación.
Como se recuerda el reporte señala que aproximadamente 200 ronderos ingresaron a las instalaciones de las Fiscalías Provinciales Penales Corporativas empleando la fuerza, agrediendo al personal fiscal y administrativo, y causando daños materiales.
El comunicado advierte que, ante estos hechos, que han puesto en riesgo la vida e integridad física del personal del Ministerio Público, la fiscalía penal competente en ejercicio de sus atribuciones constitucionales, ha dado inicio a las investigaciones correspondientes con la finalidad de identificar a los responsables y procesarlos conforme a ley.
De otro lado y estando a lo sucedido, exigen a la Policía Nacional del Perú que preste un resguardo efectivo y permanente a las sedes fiscales, especialmente a la de las Fiscalías Provinciales Penales Corporativas de Cajabamba, con la finalidad de evitar hechos similares en el futuro.
Finalmente, invocan a la población a expresar sus reclamos e inquietudes mediante el diálogo, evitando cualquier acción que perturbe la paz social y/o transgreda los derechos fundamentales de los ciudadanos y/o autoridades, pues el Ministerio Público garantiza una atención del servicio fiscal con orden, firmeza y celeridad, y con pleno respeto al ordenamiento jurídico.
